No es inesperado. Los despachos de PC en Europa Occidental cayeron un 16% con respecto a 2010, que fue de leve recuperación con respecto al 2009. De modo que, restaurando las cifras publicadas por Gartner durante estos años, se llega a la conclusión de que los 58,5 millones de unidades del año pasado retrotraen al sector a cifras anteriores a la crisis, cuyo origen suele datarse en 2008. En España, el dolor ha sido mayor: una caída del 35,5%. La inestabilidad del mercado es un fenómeno mundial, agravado en Europa. Si algo va a cambiar en 2012, será a peor, es la impresión que se recoge de la lectura del informe de Gartner. Aunque la crisis cubre todo el continente, los países del sur están marcados por un estigma: “en el cuarto trimestre, los mercados de Italia, Grecia, Portugal y España fueron golpeados especialmente, con caídas de la demanda del 30% o más”. La evolución de las marcas es seguramente lo más llamativo. HP no sólo ha mantenido su primera posición en Europa (y la ha recuperado en España), sino que su rival de los últimos años, Acer, se ha despeñado (si bien, entretanto, parece haber enjugado sus problemas de inventario). Dell, para la que la venta de PC sigue siendo importante pese al esfuerzo de diversificación, “ha sufrido el descenso de las compras de las grandes empresas y sector público”, según el diagnóstico de Gartner. Asus, en términos generales, ha sabido nadar en las aguas revueltas del canal, para cerrar el año con un saldo positivo (en el conjunto de la región, no así en España).